El VCR 8×8 «Dragón»:
Promesa de modernización en punto muerto por fallos y retrasos
- Introducción
El VCR 8×8 «Dragón» nació como la apuesta española para modernizar la flota de vehículos de combate sobre ruedas del Ejército de Tierra.
Diseñado para sustituir a modelos veteranos (BMR, VEC) y dotar a las brigadas de mayor protección, movilidad y potencia de fuego, el programa ha acumulado retrasos, defectos técnicos y controversia industrial que amenazan su puesta en servicio plena.
- Qué es el Dragón y por qué importaba
El Dragón (vehículo de combate de rueda 8×8) fue adjudicado a un consorcio español para fabricar varias versiones (infantería, zapadores, puesto de mando, transporte, etc.).
Su llegada debía permitir a las brigadas contar con un blindado moderno, aerotransportable y modular, clave en la transformación y preparación de las unidades de cara a los retos actuales y futuros.
- Cronología esquemática de entregas y expectativas
- Contrato y plan inicial: firma con el consorcio (Tess Defence y empresas asociadas) para fabricar cientos de unidades.
- Cronograma: entregas parciales previstas para 2024 y años siguientes; la planificación preveía que una parte sustancial estuviera ya operativa.
- Realidad: entregas incompletas, certificaciones retrasadas y pruebas suspendidas en momentos claves.
- Principales problemas detectados

1) Retrasos de entrega y problemas contractuales
Los plazos previstos no se han cumplido.
Lo que debía ser una entrega escalonada y certificada se ha convertido en un goteo con unidades que no alcanzan la aprobación operativa.
El Ministerio de Defensa ha sancionado al consorcio por incumplimientos y estudia medidas adicionales ante el retraso repetido.
Por qué importa: las unidades que debían recibir el Dragón siguen operando con blindados obsoletos, lo que reduce su capacidad operativa y la modernización del Ejército.
2) Fallos de transmisión que bloquean el vehículo
Durante las pruebas de la versión de infantería (VCI) se ha detectado un fallo grave de la transmisión.
En determinadas condiciones el vehículo entra en un modo de seguridad que lo deja en neutro y sin respuesta motriz.
En lenguaje sencillo: el Dragón puede «quedarse muerto» y no poder moverse cuando más lo necesita.
Este defecto llevó a suspender las pruebas de la variante de infantería hasta que se encuentre una solución fiable.
Por qué importa: un vehículo que puede parar repentinamente en combate o maniobra pone en riesgo a la tripulación y a la misión.

3) Fallos electrónicos y gestión de energía
Se han registrado problemas relacionados con la carga y gestión de baterías, vinculados al software del sistema de generación y control energético.
Problemas de gestión eléctrica pueden afectar comunicaciones, sistemas de armas y movilidad.
Por qué importa: en un blindado moderno, la disponibilidad energética y la gestión electrónica son tan críticas como la mecánica; fallos en este ámbito pueden inutilizar sistemas esenciales.
4) Coordinación industrial y responsabilidad tecnológica
El consorcio ha sufrido cambios y tensiones internas (estructura accionarial, reparto de responsabilidades técnicas), lo que ha dificultado una respuesta ágil.
Además, la interlocución entre fabricantes y los equipos de aceptación del Ejército ha sido tensa: los técnicos de Defensa se niegan a firmar la validación mientras los defectos persistan.
Por qué importa: sin una industria coordinada y madura, las correcciones tardan más y las soluciones parciales generan nuevos problemas más adelante.
- Reacción institucional y política
La ministra de Defensa ha transmitido su preocupación a la dirección de Indra y ha advertido sobre las «acciones oportunas» que el Ministerio puede adoptar frente al incumplimiento del cronograma.
Esta comunicación política subraya que el programa ha llegado a un punto en que Defensa exige respuestas concretas y verificables.
Por qué importa: la presión política puede acelerar soluciones, pero también conlleva riesgo de sanciones, renegociaciones o cambios en la gestión del programa.
- Consecuencias operativas y estratégicas
- Desfase en la modernización de brigadas: la falta de unidades operativas retrasa la implementación de doctrina y ejercicios con material definitivo.
- Coste económico: reparaciones, reprocesos y sanciones elevan el coste real del programa.
- Pérdida de confianza: tanto en la industria doméstica como en la capacidad de gestión del programa, afectando reputación y futuros contratos.
- Riesgo programático: si no se resuelven los fallos críticos, algunas variantes podrían retrasarse mucho más o sufrir recortes de pedido.
- Qué se está haciendo (y qué opciones existen)
- Correcciones técnicas: el consorcio trabaja en actualizaciones de software y modificaciones mecánicas para solventar la transmisión y gestionar mejor la energía.
- Producción: socios industriales avanzan en la producción de barcazas y componentes para alcanzar el volumen comprometido.
- Sanciones y cláusulas: Defensa ha aplicado sanciones económicas por incumplimiento y mantiene la puerta abierta a nuevas medidas contractuales.
- Certificación escalonada: se pretende validar por fases —versiones menos críticas (zapadores, transporte) antes de las más sensibles (VCI)— para no detener por completo el programa.
- Conclusión: ¿está el programa en riesgo?
El programa del Dragón atraviesa dificultades serias: la combinación de fallos técnicos, retrasos y tensiones industriales ha erosionado la confianza. No obstante, no es un fracaso definitivo: existen avances en producción y reparaciones en marcha.
El reto ahora es convertir esas soluciones en resultados verificables y rápidos: vehículos estables, certificables y en número suficiente.
Si la industria y Defensa actúan con eficacia, el Dragón aún puede cumplir su propósito; si no, el programa corre el riesgo de perder escala, elevar costes o sufrir recortes.
- Más información (lectura recomendada)
- El Debate: “Robles transmite a Indra su preocupación por el retraso del programa de vehículos 8x8 del Ejército de Tierra” (7 octubre 2025)
- Infodefensa: “Un nuevo fallo del VCR 8×8 obliga a suspender las pruebas de la versión de infantería” (octubre 2025)
Artículo elaborado con información procedente de fuentes abiertas y medios especializados en defensa.